Transformar un arquetipo no es tarea fácil. Sin embargo, es el reto aceptado por los equipos creativos y técnicos de la casa relojera Rolex El Oyster Perpetual Datejust Rolesor de Rolex, es el reloj más reconocido y a la vez más fácil de reconocer entre todos los relojes. Con su caja y su brazalete bicolores, en oro amarillo de 18 quilates y acero, donde destacan todas las cualidades asociadas a un reloj Rolex, este, nuevo modelo es la esencia de una marca. Tallado en los materiales más nobles y ensamblado con el mayor esmero, se beneficia de toda la tecnología y el «savoir-faire» del Grupo Rolex. No obstante, debe pasar las estrictas pruebas de control permanente a las que se somete cada reloj Rolex. Preciso, hermético, automático, cronómetro suizo, con indicación de la fecha, es el emblema de múltiples gene–raciones de hombres y mujeres que lo convierten en su aliado infalible. Este reloj es hoy en día inseparable de la imagen de Rolex. Cuenta con los valores que dieron el prestigio a una marca. Se trata en primer lugar de un arquetipo, el símbolo de un arte de vivir, una referencia de estilo por encima de modas pasajeras, al abrigo del tiempo. Considerado como el pilar de una gama de productos legendarios, el Oyster Perpetual Datejust Rolesor es un modelo en constante evolución. Al hilo del tiempo, la innovación técnica se funde con la estética en una perfecta armonía, respetando la tradición que dio prestigio a este modelo.
