Partidos opositores apoyan fiscalización internacional de países democráticos


Las organizaciones políticas opositoras del país dan espaldarazo a la comunidad internacional para fiscalizar o vigilar a aquellos países que suscribieron la Carta Interamericana de los Derechos Humanos de la Organización de Estados Americanos.


El Presidente del partido Socialcristiano Copei, Eduardo Fernández, luego de saludar la realización de la Trigésima Quinta Asamblea de la OEA, dijo que «la aplicación de la Carta Interamericana de Derechos Humanos (.) expresa un principio de derecho internacional público contemporáneo, según el cual la supervisión del manejo democrático, de la cultura democrática, de la vida democrática, no es algo que tiene que ver con la soberanía nacional».


En tal sentido, manifestó que la comunidad internacional debe vigilar a todos los países y a Venezuela, inclusive.


Expuso que existen violaciones a los derechos humanos en nuestro país y puso como ejemplo la llamada lista Tascón, la cual habría obligado al Presidente de la República, Hugo Chávez, a admitir que se trataba de una infamia que debía ser enterrada.


Se atrevió a preguntarse por qué molesta la supervisión a un país que se considera democrático; por lo que consideró necesario promover la democracia tanto política como económica, social, entre otros.



No hay que temer la fiscalización


Para el Presidente del partido Proyecto Venezuela, Jorge Sucre, la comunidad internacional se tiene que imponer para que las democracias no sean solamente formales, «que existan mecanismos de control».


Añadió que, «para que no se quede simplemente en el papel la labor de los organismos internacionales tiene que haber algún procedimiento de supervisión u observación de la democracia».


Manifestó que todo Paìs que no tenga nada que ocultar debe estar exento de miedo a que la comunidad internacional «le meta la lupa en un momento determinado para saber si se cumplen o no los postulados fundamentales de la democracia».


Insistió en rechazar el temor de cualquier país, particularmente latinoamericano, en la supervisión del ejercicio de la democracia.


Fue tajante cuando manifestó que «como en Venezuela no existe independencia real de los poderes, no existe autonomía y no se respeta la separación entre los poderes y las instituciones para que la democracia funcione, evidentemente se tiene miedo a la vigilancia de la OEA (.)».


Sucre fue explicito al considerar de esa forma que el sistema democrático venezolano se encuentra muy deteriorado y espera que en la 35 reunión de la Asamblea general de la Organización de Estados Americanos, que se realiza en Florida, se discuta  y se evalúe este tema en beneficio de la población venezolana.


Esperamos que en esa sesión se trate la importancia que tiene Venezuela hoy en día, un país donde lamentablemente tenemos menos democracia, donde están secuestradas las instituciones, existe una evidente discriminación política – dijo Sucre.


Insistió en el desempeño de los Gobiernos en democracia e indicó que en «democracia es relevante que no se guarden las apariencias. Es necesario que haya justicia y se atienda el problema de la alimentación, de la salud y el desempleo».


El Movimiento al Socialismo consideró fundamental el tema de la Trigésima Quinta Asamblea de la Organización de Estados Americanos para la actual coyuntura venezolana, en el marco de «las próximas elecciones. Es un tema vital para el futuro desarrollo del país».


En tal sentido, insistió acerca de la falta de garantías para efectuar los procesos comiciales del 7 de agosto, relativos a las Juntas Parroquiales y Concejos Legislativos; además de los revocatorios de diputados para el 4 de diciembre venidero.