Seguramente en más de una oportunidad usted se a automedicado. Y es que eso es muy normal hoy. Llamamos automedicación responsable al uso adecuado de medicamentos de venta libre, o sin prescripción conocidas internacionalmente como OTC (Over The Counter) y pueden ser adquiridas sin la presentación de un récipe médico, ya que son manufacturados con principios activos universalmente reconocidos por su efectividad, ya que no representan mayores riesgos para el usuario. Dada las características de seguridad y eficacia de los medicamentos sin prescripción, está permitido que sean vendidas en farmacias, supermercados, perfumerías y otros establecimientos autorizados por el Ministerio de Salud y Desarrollo Social. Vale decir, que existe un organismo internacional vinculado a la Organización Mundial de la Salud, que se encarga de transmitir el valor social y económico de la automedicación responsable, tanto a profesionales, autoridades de la salud y consumidores. Se trata del World Self-Medication Industry, (WSM), el cual está afiliado el Instituto Latinoamericano de Automedicación Responsable, (ILAR), al que pertenece la Cámara de Medicamentos Sin Prescripción de Venezuela (CAMESIP), desde donde se trabaja para lograr que el consumidor se automedique racional y responsablemente, evitando de esta manera la autoprescripción. Pero qué es la autoprescripción, es consumir medicamentos de venta con prescripción facultativa, sin una receta médica, lo cual todas las personas debemos evitar. En tanto que la automedicación responsable es el uso de un medicamento, debidamente registrado, disponible legalmente para su administración, ya sea por orientación de un profesional de la salud, o por iniciativa de la persona.
