La ministro de Industrias Ligeras y Comercio, Milco, Edmee Batancourt, informó que su despacho no otorgó un certificado de operatividad a la empresa procesadora de productos de maíz, Promabasa, perteneciente a las industrias Polar, que se encuentra ubicada en el estado Barinas. Según información suministrada por la ministro Betancourt, el Ministerio de Industrias Ligeras y Comercio solo calibró un instrumento de medición en la empresa Promabasa. –Milco no da certificados de operatividad ni registra silos, porque dicha acción no le corresponde a ese Ministerio ni al Servicio Autónomo de Normalización, Calidad, Metrología y Reglamentos Técnicos (Sencamer) -, que es uno de sus organismos adscritos. Durante las declaraciones ofrecidas en el Ministerio de Agricultura y Tierras, explicó que cuando una empresa sea esta del sector público o del sector privado «solicita al Milco calibrar sus instrumentos de medición para conocer algunos indicadores del producto, este despacho autoriza a Sencamer a fin de que calibre y certifique dicha operación. Una cosa es certificar que un instrumento está calibrado y otra cosa es certificar que una empresa está operativa. Esa no es una atribución de mi despacho». La empresa Promabasa consignó como prueba ante el Tribunal Supremo de Justicia la calibración de sus instrumentos, pero dicho documento no garantiza la operatividad de la empresa, por lo cual no es un elemento probatorio. Por su parte, el Ministro de Agricultura y Tierras, Antonio Albarrán, informó que la guardia nacional cumple un papel en las empresas intervenidas en Barinas. Afirmó que la Guardia Nacional se halla en el lugar «para evitar desordenes públicos. No se ha tomado la planta».
Explicó que se está procediendo de forma jurídica y comentó que tanto los productores como los trabajadores están en asamblea para llegar a una solución del problema.
Consideró importante el diálogo y «cada quien con lo que argumente», reunión que podría darse hoy».
Asimismo, dijo que no puede pronunciarse a favor o en contra de la situación ocurrida con una de las empresas de las industrias Polar, sin embargo, aclaró que estaba «a favor de la justicia social».
También hizo énfasis en que «la capacidad instalada de procesamiento se ponga a tono de acuerdo a la justicia que nosotros perseguimos para poder planificar».
