CARACAS- En primer lugar, se modifica el artículo 2 de la Ley, en el cual se define con precisión el significado de los siguientes términos: divisa, operador cambiario, operación cambiaria, autoridad administrativa en materia cambiaria y autoridad administrativa sancionatoria en materia cambiaria.
En segunda instancia, se modifica el artículo 9 de la Ley, a través del cual se establece que es competencia exclusiva del Banco Central de Venezuela (BCV) la compra y venta de divisas por cualquier monto, bien sea en moneda o títulos valores.
Finalmente, se modifica el artículo 16 de la Ley vigente, incorporando al Instituto para la Defensa de las Personas en el Acceso a los Bienes y Servicios (Indepabis) y a la Comisión Nacional de Valores (CNV) al proceso de supervisión y fiscalización en esta materia, convirtiéndose en auxiliares de la administración de justicia.
El Presidente de la Comisión, diputado Ricardo Sanguino, destacó que se considerará un ilícito cambiario cualquier acción que contravenga esta disposición legal.
Acotó que “no podemos permitir que haya empresarios y casas de bolsa que saquen el dinero del país y lo cambien en el exterior para su propio beneficio, sin mostrar apoyo a la producción nacional”.
“Que quede claro que a nadie se le impedirá adquirir dólares. La única diferencia es que ahora esta Ley establece que el Estado debe conocer de dónde proviene el dinero”, aseveró Sanguino.
Los parlamentarios por Podemos y Frente Ecológico-Humanista salvaron sus votos.
El diputado por Podemos, Juan José Molina salvó su voto y expresó que “se va a generar un mercado negro de dólar que no va a poder ser controlado por esta legislación”, ya que dicha reforma “dañará” los mecanismos del mercado cambiario.
Agregó que “el Estado quiere ejercer un fuerte control sobre la acumulación del dinero del bolívar a través del mecanismo que se quiere imponer con el control de cambio”.
Por su parte, el diputado Simón Calzadilla resaltó que “debemos cambiar la estrategia de intervención para disminuir el mercado del dólar paralelo. Que el Banco Central de Venezuela no ofrezca bonos convertibles sino directamente dólares contantes y sonantes”.
