El Aissami: “No es una retaliación contra la Polar”

CARACAS- El ministro de interior y justicia, Tarek El Aissami asegura que los distintos procedimientos administrativos que ha realizado el Gobierno nacional en los galpones de las Empresas Polar no responden a una retaliación sino a un proceso iniciado por el “acaparamiento” de alimentos. “Aquí hay un estado, un gobierno y una constitución…Nadie es intocable”.


Las declaraciones fueron ofrecidas en la acostumbrada rueda de prensa del partido Psuv desde Maripérez. El ministro de justicia, aclaró que toda la actuación de los organismos gubernamentales ha estado apegada a las leyes al tiempo que dice que no se puede aceptar que una empresa juegue con los intereses de la población. “Eso era en el pasado que nadie se atrevía a tocar a los amos del valle o los amos de la Polar”, expuso.


Informó que en los depósitos de Empresas Polar se han encontrado alimentos acaparados “negándoles el derecho y el servicio a los venezolanos”. Ante esta situación el Ministro enfatiza que “no nos vamos a quedar con los brazos cruzados”.
Asegura que el que infrinja la ley será castigado de acuerdo a las normas.”Las reglas de juego están claras”, manifestó.

“Cofradía”


El Aissami informó que hasta el día de ayer existen 11 detenidos y 14 sedes de casa de bolsa allanadas por las presuntas irregularidades dentro del mercado cambiario.”Hemos encontrado elementos suficientes que dan cuenta de todos los mecanismos de corrupción en el sector privado que van en detrimento de la paz”.


Aissami explica que las casas de bolsa se habían convertido en una especie de “cofradía” donde se especulaba y se generaba una serie de trámites electrónicos que provocaron una “terrible especulación e inflación que atentaba con nuestro pueblo”.


Recalcó que el Estado está obligado a supervisar, controlar y regular el mercado cambiario y “el Gobierno junto al Banco Central de Venezuela administran la política cambiaria del país”.


Asimismo El Aissami considera que el desabastecimiento de algunos alimentos es producto del descontrol del mercado cambiario y no por las medidas aplicadas por el Ejecutivo y el ente emisor.