BOGOTÁ – Colombia considera que su buena relación con el gobierno del presidente venezolano, Hugo Chávez, no debe afectar la “agenda ampliada” con Estados Unidos, su mayor socio comercial y aliado en la lucha antidrogas, señaló este domingo la canciller colombiana, María Angela Holguín.
La jefa de la diplomacia colombiana dijo que el gobierno del presidente Juan Manuel Santos, en funciones desde el pasado 7 de agosto, recompuso las nexos con Caracas por considerar que “era lo que tenía que hacer: tener una relación cordial y respetuosa con los vecinos independientemente de las repercusiones que esto tenga”.
Los vínculos bilaterales se dañaron hasta la ruptura de relaciones, decidida por Caracas, bajo la administración del ex presidente colombiano Álvaro Uribe (2002-2010), un estrecho aliado de los conservadores estadounidenses que acusó al gobierno de Chávez de dar cobijo a guerrilleros colombianos en Venezuela, lo que el mandatario niega.
Santos decidió recomponer las relaciones tres días después de asumir el poder en Bogotá, con el argumento de que los intereses de los pueblos de Colombia y Venezuela deben estar por encima de las diferencias de sus gobernantes.
El actual mandatario colombiano, ex ministro de Defensa y delfín político de Uribe, llamó a Chávez como su “nuevo y mejor amigo”, lo que el presidente venezolano correspondió con una expresión similar.
La canciller Holguín, artífice de la recomposición de las relaciones con Venezuela y Ecuador -esta última decidida el viernes pasado-, dijo este domingo que a “Estados Unidos le sirve que Colombia sea un país que no tenga frentes (de conflicto) abiertos por todos lados, sino que sea reconocido y respetado en la región”.
Holguín confió en que el Congreso estadounidense apruebe el próximo año un Tratado de Libre Comercio con Colombia y que se pueda profundizar la nueva agenda con la Casa Blanca, que, dijo, va más allá de la lucha antidrogas y el comercio.
