Armando Urbani: Un italiano de nacimiento y venezolano de corazón

El gobierno italiano a través de una comunicación firmada por su Presidente Giorgio Napolitano, concedió a través de una petición del Consulado General de Italia en Venezuela, la condecoración a Armando Urbani, como Caballero de la República Italiana.


Este mérito al Primer General de Bomberos Voluntarios de toda Venezuela, ha sido otorgado por la magnífica labor que ha desempeñado en el país y por haber contribuido de forma relevante al prestigio de Italia en el ámbito internacional.


El Consulado General de Italia evaluando diversos aspectos, concedió una excepción a la regla de entregar las condecoraciones en la ciudad de Caracas, por lo que Jessica Cupellini como máxima representante de esa entidad en nuestro país, se trasladó a la ciudad de Maturín.

Vocación de Servicio


El General Armando Urbani, proveniente de la provincia de Cosenza en la región de Calabria, emigró a Venezuela el 22 de noviembre de 1955. Desde el principio tuvo un sólo objetivo; ese que no pudo realizar en Italia y consistió en colaborar con la colectividad y servirle en lo que fuese necesario.


Venezuela fue el país que lo acogió y el cual Urbani fue adoptando como suyo, considerándolo su segunda patria. Aquí fue donde formó una hermosa familia y una gran trayectoria en el cuerpo de bomberos como voluntario, ayudando tanto a italianos como a venezolanos.


Dentro de sus logros está ser el único General de los Bomberos Voluntarios de todo el territorio venezolano con 47 años de servicio. Gracias a su arduo desempeño en diversas áreas de su profesión, lo ha hecho meritorio de todas las condecoraciones que ha recibido.


Durante 37 años fue comandante voluntario de los bomberos del estado Monagas y luego pasó a ser asesor de todos los comandos de bomberos en el territorio. Ahora es Coordinador Nacional de los Bomberos Voluntarios de los estados Monagas, Delta Amacuro, Bolívar y Amazonas.


Una de las experiencias que más lo marcó fue la tragedia de Vargas, donde tuvo que trabajar durante 15 días. Por este acto de nobleza y servicio fue galardonado por la Presidencia de la República con la condecoración de primera orden “José Tadeo Monagas”.


A sus 74 años ha graduado a casi 20 promociones de bomberos, todos partícipes de cada uno de sus logros. “Yo podré llevar varias condecoraciones como las que porto en mi uniforme pero me atrevería a decir para mí lo más grande son los bomberos que uno gradúa y que siguen para adelante, ese es el diploma más grande de mi vida” manifestó Urbani con gran conmoción.


A pesar de no ser un hombre académico, afirmó que sus años de estudio en filosofía le sirvieron en la práctica de bomberos, lo que le ha dado buenos resultados. El primer General de Bombero Voluntario de Oriente y de toda Venezuela afirmó que “sin ellos (sus subalternos) yo no sería General de bomberos”
El Comandante de los Bomberos de la Universidad de la Fuerza Armada, Luis Guzmán, insistió en enaltecer la buena labor de su General, describiéndolo como una persona que ama el servicio y que a pesar de haber venido de otro país, ha dado la vida por todos.


Comentó que en el año 1977 a la edad de 7 años ingresó a los bomberos, recibiéndolo un señor italiano quien ha sido moldeador de su vida. Partiendo de esa premisa, Guzmán se refirió a Urbani como la persona que lo inspiró, motivó y ayudó; aquella persona que dejado un legado importante con alta vocación de servicio.


Por su parte, Egle Garcés, Comandante en el Cuerpo de Bomberos del Estado Monagas, con 22 años de servicio ha conocido a Armando Urbani desde que se desempeñó como voluntaria. Para Garcés, Urbani es una persona que de corazón se ha entrega por salvar vidas.

Su mayor logro:


La familia


Il Cavaliere della Reppublica Italiana recalcó que la experiencia más gratificante de su vida fue haber conocido a su esposa Isabel de Urbani y haber tenido a sus tres hijos, Giulio, Giovanni y Giuseppina, a quienes definió como “las joyas más grandes de su vida”.


Giulio Urbani, el mayor de los tres dijo que su padre se ha esforzado por mantener a la familia y darle la mejor formación con mucha dedicación. Isabel de Urbani lo describe como el mejor padre y esposo, siempre tranquilo y confiado del desempeño en el trabajo de bombero voluntario.