CIDH pide garantizar derechos básicos en Venezuela

CARACAS- La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) mostró este viernes su “preocupación” ante la situación política y social que vive Venezuela tras las elecciones y pidió que se garanticen a los ciudadanos sus derechos básicos.

En un comunicado, la CIDH instó al Estado venezolano a adoptar “de manera urgente” todas las medidas que sean necesarias a fin de “garantizar los derechos a la vida y a la integridad personal”, así como los derechos políticos, el derecho de reunión y los derechos a la libertad de asociación y libertad de expresión.

El organismo encargado de velar por el respeto a los derechos humanos en América indicó que, tras conocer los hechos de violencia que sucedieron después de las elecciones del 14 de abril, se puso en contacto con el Gobierno de Venezuela para solicitar información sobre ellos.

Específicamente, la comisión pidió datos sobre las personas fallecidas y las investigaciones llevadas a cabo a este respecto, sobre las detenciones realizadas y su base legal, sobre la situación de salud de las personas detenidas, el uso de la fuerza en las manifestaciones, las agresiones a periodistas y las garantías laborales para evitar cualquier tipo de represalia por el ejercicio de la libertad de expresión.

Según la CIDH, Venezuela confirmó la muerte de 9 personas y señaló que otras 78 resultaron “lesionadas” durante los disturbios que sucedieron a la jornada electoral, mientras que las organizaciones de la sociedad civil han informado de 13 personas muertas en los hechos de violencia.

En su respuesta, Venezuela citó a la Fiscal General para indicar que “las víctimas eran partidarias del chavismo que fueron atacadas por grupos afectos a la oposición”, e informó de que las investigaciones judiciales sobre estos hechos están en curso.

El Estado, sin embargo, no hizo ninguna referencia a las muertes y lesiones que habrían sido consecuencia del presunto uso excesivo y desproporcionado de la fuerza por parte de la Guardia Nacional, denunciado por las organizaciones de la sociedad civil.

En su comunicado, la CIDH también lamentó que varias personas resultasen heridas por “graves” agresiones sufridas el 30 de abril en la sede de la Asamblea Nacional de Venezuela, en un contexto en el cual el presidente de la Asamblea Nacional habría “negado el uso de la palabra a los congresistas que no reconocieran de viva voz a Nicolás Maduro como presidente”.

Por todo ello, la comisión llamó al Gobierno a iniciar investigaciones sobre todas las muertes y hechos de violencia reportados, así como a reforzar todas aquellas acciones que garanticen que las investigaciones iniciadas se realicen “de forma diligente e imparcial”.

Además, se emplazó al Estado venezolano a sancionar a las personas “que resulten responsables de estos hechos”, lo cual debe ser determinado “mediante la conducción de juicios con todas las garantías del debido proceso, por un juez o tribunal competente, independiente e imparcial”.

Rechazo
En tanto el Presidente de la República Bolivariana de Venezuela, Nicolás Maduro Moros, rechazó la posición adoptada por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) con respecto a la arremetida violenta de grupos antichavistas sucedida en el país el pasado 15 de abril y consideró que el organismo siempre arremete en contra de la democracia y el pueblo venezolano.

El mandatario escribió en Twitter que ‘’la cuestionada y desprestigiada CIDH vuelve a arremeter contra la democracia y el pueblo venezolano’’.

Añadió que ‘’una vez más la rechazamos y repudiamos’’ la injerencia de esta Comisión en asuntos del país.
Ante esta postura el embajador de Venezuela ante la Organización de Estados Americanos (OEA), Roy Chaderton Matos, emitió un comunicado en el que expresó que era “deplorable, lastimosa e insólita” la postura de la Comisión con respecto a los hechos del 15 de abril.

‘’La CIDH, en su aparentemente prolija declaración, minimiza la muerte de 11 venezolanos, niños, varones y mujeres, partidarios del candidato triunfador Nicolás Maduro, arrollados, baleados o linchados por las turbas enardecidas que se lanzaron sobre las calles para desahogar la iracundia contagiada por el candidato vencido a pesar del apoyo ventajista que recibió de la dictadura imperial, de la dictadura mediática y de la ultra derecha venezolana, latinoamericana y europea”, reza el oficio.