CARACAS – Ecoanalítica es una de las firmas más consultadas por aquellos interesados en comprender el rumbo de la economía venezolana. Asdrúbal Oliveros, su director, ha visto cómo la crisis que agobia al país se ha profundizado. Desde sus conocimientos se atreve a afirmar que Venezuela está en preludio de una hiperinflación que tendría efectos devastadores para la población.
Oliveros es economista (Summa Cum Laude), egresado de la Universidad Central de Venezuela (UCV), con maestría de políticas públicas en el TEC de México y una experiencia que incluye su desempeño, durante cinco años, como analista de Santander Investment.
Recientemente, el especialista, al ser consultado sobre la inflación en Venezuela, afirmó que la única manera de detener el incremento acelerado de los precios es con un programa de reformas integral que abarque a toda la economía.
Ecoanalítica publicó un índice de precios que permite proyectar el nivel inflacionario en Venezuela durante este año.
“En los primeros cinco meses del año la inflación registró un promedio de 19%. Pero en junio saltó a 24%, en julio a 28%, en agosto a 35%, subió a 37% en septiembre y ya para octubre se ubica en 44%, con lo que el promedio de los primeros diez meses del año es de 26,4%”.
Basándonos en estas cifras, podríamos decir que existe una aceleración relevante que genera preocupación. La inflación representa los desequilibrios que tiene la economía venezolana.
Según Oliveros, uno de los factores potenciadores de este desequilibrio económico es el déficit fiscal. Al ser consultado sobre esta situación expresó:
“Tenemos un Gobierno con un elevado déficit que se ha agravado durante el mandato de Nicolás Maduro por la caída de los precios del petróleo y el no haber hecho un ajuste adecuado. Entonces, este déficit se cubre con monetización, con dinero que emite el Banco Central de Venezuela (BCV). Mientras aumenta la cantidad de dinero por esta vía la producción no se eleva o cae porque no hay cómo mantener las importaciones y se produce un descalce entre la oferta y la demanda. La consecuencia es presión en los precios”.
Además, aseguró que la recesión ha contribuido en la profundización del problema fiscal y añadió que “al comparar lo recaudado por impuestos no petroleros en términos reales entre enero y septiembre de este año con el mismo lapso de 2016 observamos una caída de 53%.”
Hiperinflación en Venezuela
El economista asegura que en la actualidad Venezuela ya se encuentra en un estado hiperinflacionario y señaló algunos elementos sintomáticos claves:
“La caída de la recaudación tributaria no petrolera en términos reales es significativa y exacerba el problema fiscal, el cono monetario pierde validez con mucha rapidez y hay problemas con el efectivo; aumento en la cantidad de bienes y servicios que se transan en dólares, incremento en la cantidad de veces que se eleva el salario mínimo y reducción en el tiempo establecido en los contratos”.
De igual manera, aseveró que para frenar la inflación en Venezuela es necesario aplicar medidas en todos los frentes. Entre ellas destacó rescatar la autonomía del BCV “para poder hacer política monetaria y cumplir con el rol de velar por la estabilidad de los precios”.
