CARACAS – “El cambio social y político, la defensa de la democracia y la libertad es una bandera de toda la Iglesia en Venezuela”, dijo hoy el padre José Virtuoso, Sj. El rector de la Universidad Católica Andrés Bello (UCAB) –una de las más prestigiosas casas de estudios de la Compañía de Jesús en Latinoamérica-, habló en el marco del Foro Los Desafíos de la Sociedad Venezolana a 60 años del 23 de enero de 1958, organizado por la UCAB.
Virtuoso, quien además tuvo por años un rol protagónico al frente de la revista SIC, y del Centro Gumilla, fue en contra de las amenazas de Nicolás Maduro a los arzobispos de Lara y Yaracuy. “Es fundamental construir una unidad más que táctica, estratégica”, sugirió una línea de trabajo para una desvencijada oposición.
Jueves y viernes de esta semana Gobierno y oposición darán una última tanda al diálogo en República Dominicana. Esta vez no se ha tratado de un fracaso estridente, como en ocasiones anteriores, pero una sombra de sospechoso silencio ha caído como neblina de lado y lado.
¿Qué pasará con las presidenciales?
“El problema fundamental no está solo en las garantías electorales sino en la defensa del voto”, aseguró Virtuoso. Hoy el ex presidente español, Felipe González, ha lanzado un dardo: no habrá elecciones limpias este año, a su juicio. De su lado, el diputado Stalin González (MUD) ha deslizado en los medios que ya hay un mesa técnica trabajando en las primarias.
En días recientes, Claudio Fermín –por años una ficha de peso en Acción Democrática- lanzó su candidatura. También lo ha hecho Henry Falcón, una especie de chavista “light”, que pendula entre una prédica social (tal vez asistencialista) y el ataque recurrente al Gobierno. La encuestadora Hinterlaces ha asomado la candidatura de Lorenzo Mendoza, al timón hoy de Empresas Polar, el holding de alimentos y bebidas más poderoso del país, y un conglomerado constantemente en el ojo de la tormenta, siempre bajo el asedio del oficialismo. Mendoza ha mantenido bajo perfil.
“Cuando (Hugo) Chávez llega al poder se encuentra con una Iglesia combativa que desde la década de los 80 había sido crítica”, recordó el padre Virtuoso. “Si bien el dirigente político ha intentado convertirse en un líder religioso, en la Iglesia no pretendemos convertirnos en líderes políticos”, dijo sin empacho, en torno a la posible presencia del clero como catalizador. Toca decir amén.
