CARACAS – Un grupo de naciones impulsadas por Estados Unidos iniciaron una serie de acciones en cuanto a persecución de la corrupción en Venezuela. El objetivo específico, sería el de rastrear e incautar bienes de funcionarios considerados corruptos y devolverlos al país, una vez que el Gobierno actual haya abandonado el poder. La primera reunión se llevó a cabo de manera privada en la sede del Fondo Monetario Internacional (FMI).
Estados Unidos, especialmente desde el Departamento del Tesoro, fue el responsable de planificar la reunión, en la que también participaron representantes de Alemania, Argentina, Brasil, Canadá, Colombia, España, Francia, Guatemala, Italia, Japón, México, Panamá, Paraguay, Perú y Reino Unido. La información la dieron a conocer dos integrantes del organismo encargado de administrar el tesoro público de Estados Unidos.
Otro hecho que se busca evitar es que el Gobierno en su estado al borde de la quiebra, busque liquidar activos del estado venezolano en el extranjero como refinerías o la empresa Citgo, con el objetivo de aferrarse al poder. En este sentido, los países también acordaron prepararse para colaborar con Venezuela una vez cuente con un Gobierno apoyado por la comunidad internacional.
El secretario del Tesoro de Estados Unidos, Steven Mnuchin, difundió un comunicado redactado por su persona, para dar a conocer a la luz pública la reunión sostenida por este grupo de países. Aseguró que estas naciones están de acuerdo en fortalecer su cooperación, con la finalidad de restringir los aparatos de corrupción protagonizados por funcionarios venezolanos.
En el entorno de esta reunión, el ministro de Hacienda de Colombia, Mauricio Cárdenas, dio a conocer una investigación realizada en conjunto por Colombia y Estados Unidos, acerca de la corrupción que surge a raíz de los mecanismos de distribución de alimentos del Gobierno venezolano. Aseguró que el dinero que sale de Venezuela para adquirir alimentos, termina retenido por personas y compañías vinculadas al régimen venezolano.
