BRUSELAS – Agrupados bajo el lema “Construyendo puentes y reforzando nuestra asociación para afrontar los desafíos globales”, los representantes de la Unión Europea (UE) y de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC) se reúnen por segunda vez para abordar una interesante agenda.
La crisis política en Nicaragua y Venezuela será uno de los temas principales analizados por los cancilleres europeos, latinoamericanos y caribeños durante la cumbre de Bruselas, durante la que se buscan estrechar los lazos comerciales, migratorios y de cambio climático, indicó el ministro de Relaciones Exteriores español, Josep Borrell.
Ante la negativa del Grupo de Lima a participar en octubre pasado en la tercera cumbre de mandatarios planificada en San Salvador por la situación en Venezuela, fue necesario reprogramar el encuentro pero sosteniendo los mismos puntos, porque al evaluar el contexto mundial y según la diplomacia brasileña, están dadas las condiciones para “reafirmar los valores que aproximan a América Latina, el Caribe y la UE a nivel mundial”.
“La agenda recoge así temas en los que ambos bloques, que representan a más de mil millones de habitantes, coinciden frente a Trump como la defensa del Acuerdo de París sobre clima, el multilateralismo o las negociaciones comerciales en curso”, citó Banca y Negocios.
En la reunión, presidida por el canciller salvadoreño Carlos Castaneda y por Federica Mogherini de la UE, participarán un representativo número de ministros de la CELAC y de la UE.
Igualmente, se supo que estará presente por Venezuela, Jorge Arreaza, quien estará entre los delegados de la una reunión de cancilleres de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC) en Bruselas, Bélgica.
La situación nicaragüense después de la nueva ofensiva del gobierno de Daniel Ortega donde se registran 280 muertos durante los tres meses de protestas, los cancilleres condenaron los actos de violencia y abogaron por una solución pacífica y democrática en el marco del diálogo nacional, con la mediación de los obispos.
Nicaragua forma parte de los países bolivarianos del ALBA, como Venezuela, al que la UE impuso un embargo de comercio de armas y una serie de sanciones contra 18 funcionarios, entre ellos la vicepresidenta Delcy Rodríguez, por la situación que vive el país.
Al término de los dos días del encuentro, se estima aprobar una declaración conjunta sobre cómo reforzar las relaciones.
