Baltazar Porras desea servir de plataforma entre dirigencias políticas

Un diálogo sincero donde no se busque eliminar a los contrincantes y en que no exista ni violencia ni insultos es la exigencia del cardenal Baltazar Porras
Un diálogo sincero donde no se busque eliminar a los contrincantes y en que no exista ni violencia ni insultos es la exigencia del cardenal Baltazar Porras

CARACAS – Baltazar Porras, quien recientemente asumió el cargo como Administrador Apostólico de la Arquidiócesis de Caracas, no tardó mucho en meterse en terreno político para criticar a las dirigencias políticas del país. Aseguró que Venezuela se encuentra en una terrible crisis y alegó que esto se debe a que “pareciera” que las dirigencias “de un lado y del otro” estuvieran desligadas de la realidad.

El cardenal hizo un llamado a que se comience a trabajar desde “la comunidad”. En este sentido, realizó un llamado a la unión:

“Tenemos que unirnos para responder mejor a las necesidades. Ver mucho más lo que nos une y no lo que nos diferencia. Se debe hacer con la participación de todos porque nadie tiene la verdad absoluta”. 

El mismo día que el cardenal ofreciera estas declaraciones, miembros del Frente Amplio Venezuela Libre (FAVL) acudieron a la sede de la Conferencia Episcopal Venezolana (CEV) para comprometerse con los representantes eclesiásticos a buscar soluciones a la crisis que atraviesa el país. Asimismo, la coalición política solicitó a la iglesia que intermedie con el Gobierno, para que este permita la entrada de ayuda humanitaria.

Sobre el punto de la mediación también tuvo palabras el cardenal Porras, que aseguró que desde su función, como la de su equipo, es “servir de plataforma” para que los dirigentes políticos “conversen de forma civilizada”. Manifestó que desde la iglesia estarán abiertos a un diálogo sincero, en el que no se busque eliminar a los contrincantes y en el que no exista ni violencia ni insultos.

El nuevo Administrador Apostólico de la Arquidiócesis de Caracas asumió este rol el pasado 24 de julio en la basílica de Chiquinquirá. En sus primeras palabras, el cardenal manifestó que las principales acciones que piensa tomar consisten en “escuchar y atender los clamores, necesidades y expectativas del pueblo”.

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