CARACAS – Desde la semana pasada, los venezolanos residenciados en Chile que pueden descargar su certificado de una plataforma web, deberán pagar en dólares americanos para poder validar el documento en su sede diplomática.
Los afectados consideran abusivo el cobro de 50 dólares para legalizar un certificado de antecedentes penales, que se solicita a todos los venezolanos inscritos en el proceso extraordinario de regularización migratoria en Chile.
El trámite regular era solicitar desde Chile el documento por internet sin ningún costo e imprimirlo, pero después se hizo necesario validarlo en la sede diplomática, pero la novedad, según notificación del Consulado de Venezuela en Chile viene con la obligación de apostillar el documento desde ahora, según dio a conocer el Departamento de Migración y Extranjería.
Regularmente, los venezolanos podían solicitar el documento desde Chile, mediante internet, y solo debían imprimirlo. Sin embargo, a esto se sumó el requisito de validar ese certificado en la sede diplomática. «El cambio se debe a información nueva que nos llegó desde el consulado de Venezuela, que solicita apostillar el documento desde ahora», respondió el Departamento de Extranjería y Migración a un usuario.
La presidenta de la organización Amigos de Venezuela en Chile, María Laura Liscano, destacó que quienes necesitan el certificado están en situación irregular y no pueden trabajar, lo que afecta también sus ingresos y les complica el pago de los más de 30 mil pesos chilenos.
Perfil del migrante venezolano
Durante el mes de abril el gobierno chileno declaró que la mayoría de sus inmigrantes provenía de Venezuela, mientras que la segunda población inmigrante era de Haití.
Los cálculo del gobierno apunta a que existen casi 600 mil extranjeros viviendo en Chile, lo que equivale a 2.4% de la población total del país. De esta cifra cerca de 300 mil personas están en condición de ilegales.
El departamento de Extranjería y Migración del ministerio del Interior informó que en el año 2017 fueron otorgadas 267.596 visas temporarias o sujetas a contrato. Esto representa 53% más que el año 2016. De dicha cifra, 73.386 fueron entregadas a venezolanos y 46.239 a haitianos.
El pasado 9 de enero la ex fiscal de la República, Luisa Ortega Díaz, pidió al gobierno chileno medidas de apoyo para los venezolanos que vivía en esa nación y una de las propuestas era facilitar los trámites para el reconocimiento de los títulos universitarios a los venezolanos que no pudieron apostillar sus documentos.
Los registros indican que la migración hacia la nación sureña se ha incrementado, pues para mediados de 2017 se habían registrado 32.089 solicitudes de residencia desde Venezuela, superando la cantidad total de 2016 de 31.949, lo que deja claro que los venezolanos son la comunidad extranjera que más crece en Chile.
Según Gilberto Aranda, profesor de la Universidad de Chile, la mayor parte de los venezolanos que arriban a ese país, se trata de profesionales con pocos años de egresados. “Quieren vivir con prosperidad económica y un clima de libertad política que no encuentran en Venezuela”.
Mientras que Héctor Carvacho, académico de la Escuela de Psicología de la Universidad Católica de Chile afirma que “El inmigrante venezolano es distinto a otros latinoamericanos – consideró Es gente más calificada en términos educacionales y laborales. Su inclinación difiere un poco al resto”, por lo que afirma que el venezolano que emigra a Chile busca incorporarse en sectores de estatus medios altos.
Además de aceptar solicitudes de residencia por parte de los venezolanos, Chile ha dado asilo político a varios magistrados designados al Tribunal Supremo de Justicia por la Asamblea Nacional, quienes son perseguidos políticos del régimen de Maduro.
