CARACAS – El presidente Nicolás Maduro señaló este miércoles un posible retiro de embajadores cuando asuma el segundo mandato el próximo 10 de enero, y destacó que quienes critiquen su investidura, pueden irse de Venezuela cuando gusten.
En rueda de prensa, indicó ante la prensa extranjera que “los gobiernos que hagan lo que quieran. ¡Si se quieren ir de Venezuela con sus embajadores, que se vayan todos, ya!”.
Por su parte, el pasado viernes, Perú anunció que planteará en una reunión del Grupo de Lima a realizarse en Bogotá el 19 de diciembre, romper las relaciones con Venezuela y prohibir el ingreso de la cúpula gubernamental a los 14 países del bloque.
En respuesta, Maduro expresó que “a Venezuela no la va a chantajear nadie. Quien se quiera ir con su embajador, ahí está el aeropuerto de Maiquetía, ¡váyase de aquí!”
Y exigió a quienes se queden “respeto”, mientras exclamó que “a mí no me va a venir ningún embajadorcillo a poner mala cara. O respeta o se va, allá ellos”, y aseguró que a su toma de mando asistirá mucha gente.
Vale recordar que el mandatario venezolano fue reelegido el pasado 20 de mayo en un cuestionado proceso electoral calificado por la oposición y comunidad internacional como fraudulento, y desconocida por Estados Unidos, la Unión Europea y una docena de países latinoamericanos.
Rupturas diplomáticas
Agregó el jefe de Estado que las más importantes potencias de este mundo lo apoyan y quieren y manifestó que debido a los ejercicios de defensa que realizan conjuntamente con Rusia, trajeron dos bombarderos y otras aeronaves a Caracas.
Haciendo frente a los cuestionamientos de Estados Unidos, Maduro pidió citar al encargado de negocios norteamericano y advirtió con expulsarlo del país “si se pasa de la raya”.
Mientras tanto, con la Unión Europea no está planteado romper los vínculos y más bien se acordó crear un “grupo de contacto internacional” que facilite un diálogo entre el gobierno y la oposición.
No obstante, Maduro ha visto estrecharse el cerco diplomático en su contra ante la masiva migración provocada por la crisis económica, con escasez de alimentos y medicinas y una inflación que el FMI proyecta en 10.000.000% para 2019.