CARACAS- José Luis Azuaje presidente de la Conferencia Episcopal Venezolana, afirmó que el desempeño del Gobierno es ilegítimo y moralmente inaceptable. En Venezuela llegó el momento de fortalecer los liderazgos.
El arzobispo le dirigió un mensaje al nuevo presidente del Poder Legislativo, manifestándole que le tocará dirigir sabiamente ese organismo legislativo para reactivar la credibilidad de los venezolanos en la política y la búsqueda de salidas democráticas a esta grave crisis humanitaria y material que vive el país.
Y a la Asamblea Nacional en general, los convocó a trabajar para recomponer el orden democrático desde el ámbito constitucional y estén cerca del pueblo que les ha elegido, también que ejerzan lo que llamamos en la Iglesia el ministerio de la escucha y toquen las heridas y el sufrimiento de las personas en sus comunidades.
“A la nueva directiva de la Asamblea Nacional le toca dirigir el camino, porque los ciudadanos les volvieron a dar el voto de confianza”, dijo durante la instalación la CXI Asamblea Plenaria del Episcopado Venezolano, en la Universidad Católica Andrés Bello.
El arzobispo de Maracaibo cerró su ponencia explicando que lo que acontece en Venezuela sirva como experiencia a toda la sociedad, no solo a los políticos, y que el país no debe ver únicamente los peligros que le avizoran, sino también las oportunidades que tiene para desafiarlos.
Por otro lado Benigno Alarcón docente de la UCAB manifestó en su intervención que cuando los costos de mantener el poder sean mayores que salir de él, será posible la transición.
El director del Centro de Estudios Políticos y de Gobierno de la UCAB, considera que una transición forma parte de un juego muy amplio. Las elecciones son parte de ese juego, no lo son todo, explicó.
Después de Alarcón, expuso el doctor Víctor Guédez, consultor gerencial quien aseveró que las tendencias polarizadas y radicales son peligrosas en la crisis actual. El sentido de pacificación no puede subestimarse en ningún sector.
En la opinión de Guédez, el trabajo de todo demócrata debe comenzar por la unidad en la diversidad y hacia la solidaridad.
