Historia de la Calle Negrín en Caracas

Calle Negrín a inicio del siglo pasado y hoy en día.
Calle Negrín a inicio del siglo pasado y hoy en día.

Caracas es una ciudad con muchas curiosidades, nombres coloquiales en las esquinas, fantasmas y aparecidos, tesoros escondidos, pero también tiene personajes nativos o extranjeros que de alguna manera, formaron parte de la historia y que a posteriormente le dieron nombre a una calle o zona de la ciudad.

Uno de esos personajes fue de Jesús María Negrín, quien siendo apenas un muchacho, logró que la historia caraqueña lo tuviese en cuenta al nombrar una calle en su honor… bueno muchas son las historias en torno a este personaje pero ASÍ ME LO CONTARON Y ASI LO CUENTO YO….

 

 

La calle más famosa y más grande de Sabana Grande es la “Calle Negrín”, que va desde la Florida hasta Sabana Grande. A mediados de la segunda década del siglo pasado, se hizo famoso el apellido “NEGRIN”.

Unos veían a este personaje como un ente mitológico, otros como un brujo o empírico. Muchos lo tenían como un médico famoso, es decir, se conjeturaban las leyendas más fantásticas y graciosas en tormo a la vida y obra de este recordado hombre, Jesús María Negrín.

La historia que me contaron es así…. para fines del siglo XIX entre los Dos Caminos y Petare, Jesús María y Rufino Negrín vivían con su madre en la Cañada, cercano a los Dos Caminos. Una noche un viajero, profesor de botánica de un instituto en Berlín, que recorría el mundo buscando plantas específicas para sus estudios y deseaba subir al Ávila, ofreció buena paga a quien le ayudara a cargar su equipaje y se ofreció para ello el joven llamado Jesús María Negrín. Esa mañana estaban en marcha y estuvieron en el Ávila durante varios días, cuando regresaron Jesús María estaba encantado, contando los detalles de la interesante excursión.

 

El profesor, por su parte, hacía elogios de la inteligencia del muchacho y pedía siguiera como empleado para el recorrido que tenía que hacer por toda Venezuela. Es así como Jesús María Negrín visitó los Llanos, los Andes, el Orinoco y se inundó de conocimientos botánicos.

Un mal día en Apure el profesor alemán murió y Jesús María se vino a Caracas y volvió a la Cañada, con la tristeza en el corazón de haber perdido a su maestro, su protector y a su gran amigo, pero pleno de útiles conocimientos con una desarrollada inteligencia y una visión de futuro.

Un buen día, se presentó por su casa una comadre que tenía una hija enferma y que nadie sabía lo que padecía, Jesús María la examinó y le dio a la madre una receta que le hizo botar cantidad de lombrices y la niña se curó. La madre agradecida, fue de vecindario en vecindario comentando la habilidad de Jesús María Negrín y le comenzaron a llegar los enfermos en la Cañada.

 

 

Al principio no quería hacerlo, pero luego viendo aquello como una oportunidad de trabajo y servicio al prójimo aceptó, por supuesto comenzó a crecer su fama, curaba a cuantos enfermos de males estomacales se le presentaba y la gente prefería verse con él antes de que con un médico titulado, al punto que los médicos tuvieron que intervenir hasta que se le hizo meter en la cárcel y allí estuvo preso hasta que sucedió algo increíble.

Don Juancho Gómez, presidente del estado Miranda, se enfermó y los médicos no atinaban con su dolencia, alguien le habló de Negrín, y a Don Juancho Gómez le gustó la idea, por lo que lo sacaron de la cárcel y al recibirlo le dijo: “si usted me cura mi dolencia yo lo pongo en libertad, si no… ya sabe que le espera….

Jesús María Negrín lo examinó y le dijo “usted tiene tal y cual parásito, tómese esto y se curará” y así sucedió, Juancho Gómez se curó y mandó a poner en libertad a Negrín.

 

 

Esto trajo más fama a Jesús María Negrín, pero allí comenzaron de nuevo las protestas de los médicos que no lo dejaban ejercer, pero en vista de sus grandes conocimientos, se le permitió hacer un examen y se le concedió un título de “herborista parasitólogo”.

Entonces pudo ejercer su profesión sin problemas y mudó su dispensario a Sabana Grande donde atendió a casi toda Caracas y fue tal su fama, que hasta la calle donde vivía, se le concedió el nombre de calle NEGRIN. Jesús María Negrín murió en 1933 pero dejó un legado en la ciencia herborista.

Arq Ricardo Rodríguez Boades