CARACAS- La Organización de Venezolanos Perseguidos Políticos en el Exilio (Veppex) inició un censo de los militares venezolanos que se encuentran fuera del país, en el entendido de que la solución a la crisis “ameritará una acción de fuerza”.
Alrededor de 200 militares, principalmente desde EEUU y Colombia, se han registrado en las primeras horas en que la web: www.censomilitarveppex.com ha estado abierta, dijo José Colina, presidente de Veppex y exmilitar venezolano.
Colina, estima que los militares que se encuentran en el extranjero suman unos 4.000, y que con esta iniciativa se pretende saber cuántos son, en qué países se encuentran y establecer contacto con ellos para ver cómo pueden ayudar a una salida de la crisis en Venezuela.
“Ante la situación que vive Venezuela y entendiendo que la solución ameritará una acción de fuerza antes, durante y después de la salida de Maduro del poder, es obligatorio saber dónde están los militares que se opusieron a esta tragedia y si estarían en disposición de regresar en cualquier escenario”, señala un comunicado de Veppex.
La organización con sede en Miami destaca que “la plataforma ha sido desarrollada tomando las medidas de seguridad necesarias y la información que se genere de este censo está bajo la responsabilidad y custodia de la organización Veppex”.
Colina afirmó que los militares fuera del país pueden ser útiles en cualquier escenario: si hay una sublevación interna como refuerzo de los alzados y si hay una intervención basada en tratados de asistencia recíproca para controlar la situación y dar estabilidad al gobierno de transición.
En caso de que no se dé ninguna de esas situaciones, Colina indicó que también podrían intentar entrar en Venezuela para forzar la salida de Maduro.
“Necesitas a los militares para poder tener gobernabilidad en Venezuela”, aseguró Colina, quien considera “un desastre” los encuentros exploratorios para un diálogo entre el Gobierno de Maduro y la oposición liderada por Juan Guidó realizados en Noruega, ese “error le está costando apoyo y credibilidad”, porque no se puede negociar con “un régimen criminal, narcotraficante y usurpador”.
La organización se propone realizar otro censo de los funcionarios policiales, de seguridad y funcionarios públicos que se encuentren en el exilio con la misma finalidad.
