El toque napolitano de los Verlezza llega a la mesa criolla

CARACAS – La realidad venezolana ha hecho que sus habitantes busquen alternativas para reinventarse y emprendan nuevos proyectos y actividades, muchos de los cuales son iniciativas que comienzan con el apoyo del grupo familiar y terminan en muchos casos, consolidándose como un interesante negocio y forma de vida.

En ocasiones esa capacidad de reinventarse se apoya en la cultura y tradiciones heredadas de la familia, como es el caso de Margarita Verlezza D’Addio, quien junto con su esposo el chef José Luis Benítez Jiménez, llevan adelante desde hace tres año Verlezza Delights.

Foto: Carlos Germán Rojas

Esta iniciativa consiste en la preparación de especialidades de la cocina italiana con base en recetas tradicionales de la Campania y un toque de fusión, con la que se busca recuperar platos con sabores caseros, atesorados en los viejos recetarios de los abuelos originarios de la provincia de Caserta.

Verlezza también se ha encargado de trasladar todas estas experiencias y preparar lo que será su primer libro de cocina, actualmente en proceso con la compilación de recetas, fotografías e historias, siempre acompañada por Benítez, quien también aporta de su familia paterna el menú asturiano.

La vasta experiencia se ha ido ampliando desde el año 2016 con una formación culinaria especializada que realizan ambos cocineros en el Centro Venezolano de Capacitación Gastronómica de Caracas (CVGG), para obtener el grado de Estudios en Artes Culinarios que gira alrededor de la cocina napolitana.

La satisfacción de crear

Margarita Verlezza también cuenta con una maestría en pastelería y panadería, además de estudios como chocolatera, actividades que realiza trabajando en conjunto con sus comensales para crear innovadores platos que le den riendas sueltas a su imaginación gustativa.

La comida italiana, al menos desde las primeras olas migratorias de la década de los cincuenta, se ha acoplado al paladar venezolano y en ocasiones ha adaptado sus sabores, por eso, agregó Verlezza, sus preparaciones no son masivas, ni es comida rápida y por el contrario, le da satisfacción cuando la gente la degusta y se siente bien con los platos que prepara.

De esta forma integra las clásicas berenjenas a la vinagreta con involtini, ravioli, tagliatelle, tortellini ripieni y linguini; acompañados del ragú clásico, pero también alle vongole, ai frutti di mare, aglio e olio y arrabiata, si de sabores intensos se trata, mientras que para postres las opciones se multiplican con mermeladas, trufas, profiteroles, tartaletas, red velvet, tiramisú, babá, sfogliatelle y los struffoli.

   

La inquietud de esta emprendedora corre por las venas desde que era pequeña, cuando aún estando en el colegio se dedicaba a la repostería y en paralelo aprendía a coser con su madre Luigia Maria D’Addio Lettieri, hasta que de adultas mantuvieron por treinta años una tienda de ropa para mujeres “Tita’s Boutique”, ubicada en el Centro Comercial Lago de Catia, actualmente en inventario y reinvención.

Entre fusiones, un menú napolitano criollo, panes, pasteles y el buen vestir, se mantiene el entusiasmo de una ítalo venezolana preocupada por combinar la gastronomía con el buen gusto y las tradiciones de sus antepasados.