CARACAS – Este miércoles, la Organización No Gubernamental (ONG), Human Rights Watch (HRW), informó que grupos paramilitares de Colombia y Venezuela controlan de forma “feroz” ambos lados de la frontera que comparten las dos naciones.
Así lo detalla el último informe que realizó titulado: ‘Los guerrilleros son la policía’: Control social y graves abusos por parte de grupos armados en el departamento colombiano de Arauca y el estado venezolano de Apure”.
La institución aseguró que los bandos “contralan la vida” del departamento colombiano, Arauca, y el estado venezolano, Apure. Señaló que estos grupos cometen abusos que la mayoría de las veces quedan en la impunidad.
El director para las Américas de HRW, José Miguel Vivanco, detalló que los grupos son el Ejército de Liberación Nacional (ELN) comandado por disidentes de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) junto con el grupo venezolano, Fuerzas Patrióticas de Liberación Nacional (FPLN).
El representante sostuvo que estos equipos tienen fuerza y la capacidad de imponer su ley; es por ello que afirmó que someten a las personas a “homicidio, tortura, extorsión, secuestro, reclutamiento de menores, abuso sexual y trabajo forzado”
La investigación resalta que los activistas del ELN se trasladan con total facilidad, mantienen campamentos en el estado Apure y utilizan a Venezuela como su retaguardia”.
La ONG reconoció que desconoce la magnitud de los tamaños y de los poderes que tienen estos grupos paramilitares. Sin embargo, destacó que el FPLN tiene exmiembros de los denominados “colectivos”.
La organización en el informe no se refirió si estos grupos clandestinos tanto de Colombia como de Venezuela tienen alianzas. Pero, si registró varios acontecimientos de casos de trabajo forzado como castigo.
Puntualizó que las victimas las llevan a territorio venezolano en el cual los obligan a realizar tareas agrícolas o alimentarias por un determinado tiempo.
