CARACAS – Fausto Romeo presidente de la Asociación de Institutos Educativos Privados, informó que la continuidad del presente año escolar será a distancia y ese es un término que se debe explicar bien a la comunidad educativa.
“Es un nuevo formato, una educación a distancia, la suspensión es únicamente lo presencial. El núcleo de todo es esto es una pandemia y la pastillita para curarnos es mantenerlos en casa”, dijo.
Explicó que este lunes realizaron una reunión on-line con el ministro de Educación, Aristóbulo Istúriz sobre los términos en los que se llevará a cabo el proceso de impartir clases on-line.
Comentó que el primer lapso ya se había finalizado, y el segundo se ha ido terminando en medio de la cuarentena decretada por la pandemia, lo que les ha servido como prueba y preparación para que la próxima semana comience el tercer lapso, que culminaría a mediados de julio con el objetivo de cubrir los contenidos programados.
Considera que se deben establecer plazos de labores en el hogar, para no saturar a los estudiantes y docentes, organizando horarios y duración de las actividades.
En bachillerato serían tres bloques en la mañana de 45 minutos, esta es la modalidad que se podría aplicar y dos bloques en la tarde de 45 minutos. En primaria, con dos bloques en la mañana de 40 minutos y en la tarde uno o dos bloques del mismo tiempo. En preescolar o maternal aplicaría dos bloques de 25 minutos por las mañanas y otro del mismo tiempo en la tarde.
Regionalizar mecanismos
El representante de los colegios privados sugirió “regionalizar” las modalidades de enseñanza según las realidades de cada estado del país, ya que no todas las regiones tienen las mismas posibilidades en cuanto a la garantía de servicios públicos.
Romeo anunció que se está diseñando un plan de psico-afectividad a través de Unicef para darles herramientas que permitan llevar a adelante estas nuevas modalidades de pedagogía, para los estudiantes, maestros, padres y representantes.
Referente a la situación que viven los maestros, apuntó, que trabajan más horas de las que realizan normalmente en el salón de clases y están adaptando sus metodologías al uso de recursos como WhatsApp, Google Class Room o Zoom, cuando las posibilidades tecnológicas lo permiten.
Deficiencia de servicios públicos
Por su parte, Nicolás Maduro solicitó que el período escolar 2019-2020 culmine con clases on-line, para evitar el contagio de Covid-19 en los jóvenes y niños.
Las familias venezolanas no tienen un servicio de conexión a internet estable, más del 62% de los usuarios reportó fallas en datos recogidos por el Observatorio Venezolano de Servicios Públicos en diciembre de 2019, en lo que respecta al servicio de la empresa estatal.
El suministro de energía eléctrico en Venezuela también representa otro obstáculo para los docentes que deberían impartir sus clases, ya que diferentes estados del país, sufren continuos apagones o cortes de energía programados lo que dificulta la conexión en las comunicaciones.
