CARACAS – Este lunes, Venezuela nuevamente inició la semana de flexibilización ampliada en todo su territorio nacional. No obstante, en esta oportunidad se incorporan nuevos sectores económicos que no habían tenido la oportunidad, ni la orden de reactivar sus actividades comerciales desde marzo. En ese mes fue cuando el país registró sus primeros casos de COVID-19 e inmediatamente entró en la fase de cuarentena.
En esta oportunidad, las áreas que reabrieron sus puertas son: mueblerías, piñaterías, quincallas, confiterías, joyerías, casas de empeño, floristerías, viveros, perfumerías y entidades similares del pequeño y mediano comercio.
También se suman los expendios de licores, posadas, hoteles, playas, clubes, balnearios, parques infantiles y temáticos, teleféricos, eventos en sitios abiertos, restaurantes, cafeterías, heladerías y similares.
De igual forma, varios entes gubernamentales abren sus operaciones al público como lo son: Instituto Nacional de Tránsito Terrestre (INTT), el Servicio Autónomo de Identificación, Migración y Extranjería (Saime), el Servicio Nacional de Control de la Calidad y Metrología (Sencamer).
Previamente, los únicos sectores que solo estaban laborando en las flexibilizaciones y que esta semana también estarán subiendo sus santamarías son: agencias bancarias; consultorios médicos, odontológicos y veterinarios; sector construcción; ferreterías: peluquerías; industria química, textil y calzado.
Además, se encuentran: higiene y limpieza; talleres mecánicos, partes y autopartes; servicios especiales de refrigeración y plomería; sector transporte; autolavados; ópticas; reparaciones electrónicas; comercializadores de sector textil, calzado, y mercerías; industria y comercialización de papelería: 7 a.m. a 12 p.m.
Por último están: heladerías y cafeterías; lavanderías y tintorerías; fabricación y ensamblaje de equipos eléctricos y electrónicos; servicio de encomiendas; registros y notarías; Eventos deportivos sin público y gimnasios; autocines; Centros comerciales y mercado de valores y seguros.
Todos estos sectores comerciales deben cumplir con las medidas de bioseguridad y disminuir el aforo real al 40% para evitar focos y contagios de la enfermedad.
