Galerías se apoyan en redes sociales para subsistir

CARACAS – El negocio de las galerías de arte es uno de los sectores que se vio obligado a reinventarse para subsistir durante la pandemia, apalancándose en las redes sociales como alternativa para proyectar y vender las obras y piezas expuestas que prometían un gran año.

El confinamiento llevó al cierre total de los espacios en todo el mundo. Y Venezuela no fue la excepción. Los centros comerciales, espacios culturales, hoteles, museos  y galerías independientes del País tuvieron que cerrar sus puertas para apenas comenzar a reabrir de forma parcial durante la flexibilización del pasado diciembre.

 

Amanda Márquez, dueña de la galería caraqueña Artesanalia2, explicó a la “Voce” que la pandemia los afectó sobremanera, pues apenas en febrero de 2020 habían inaugurado una exposición colectiva sobre el Ávila. Sin embargo a diferencia de otros que permanecieron cerrados, al mes ya se habían activado nuevamente apoyados en las redes, lo que permitió incluso que algunas piezas se vendieran.

La experiencia hizo que se apalancaran en el recurso tecnológico y comenzaran a publicar a diario las obras, hecho que resultó positivo. Permitió a un gran número de seguidores visitar los perfiles de la galería en busca también de una especie de entretenimiento.

Comentó que, como hecho curioso, la gente empezó a sentir deseos y una necesidad de decorar, remodelar las casas, los espacios, pintar, ordenar y hacer cosas nuevas que los distrajera en el largo encierro obligatorio. Esto favoreció que se mantuviera muy activo el movimiento y el trabajo vinculado con el arte durante el confinamiento.

Vender en pandemia

Márquez quien se caracteriza por ser una mujer muy activa e incansable, asegura que no paró de trabajar y logró la venta de algunas piezas grandes y otras de pequeño formato, así como encargos específicos a petición de clientes, entre las cuales algunas para llevar fuera del país.

Agregó que luego vino el fenómeno de las alianzas entre artistas y galeristas con lo cual se logró reducir un poco los precios y estimular la venta de piezas, hecho que en lo particular le funcionó también gracias al apoyo de las redes.

En cuanto a realizar exposiciones virtuales, la empresaria prefiere publicar obras individuales de artistas, pues en su opinión, eso es de por sí una exhibición.

Indicó la galerista que también han trabajado por citas privadas y atención personal en casos de que un cliente desee ver una obra específica, además de realizar entregas por delivery o personal. Sin embargo, es poco el movimiento del negocio, lo que ha llevado a diversas galería a cerrar definitivamente sus puertas. En algunos lugares, los costos son insostenibles, y otros apenas comienzan a reactivarse debido a la flexibilidad de la cuarentena.

Señaló que los artistas también hacen sus ventas directas. Sostiene que cuando se representa a un talento, hay que ser serio en los acuerdos y tener presente que todo pasa por la galería. Es diferente trabajar por cuenta propia, por eso lo importante de llegar a acuerdos y apoyar la proyección internacional, así como establecer si se trabajará en una especie de consignación, o las piezas son propiedad de la galería. Todo es cuestión de negociar y buscar beneficios para ambos, lo que a veces resulta difícil, indicó la experta.

En cuanto a la reapertura, con esta primera muestra de Tatiana Mantilla que estará casi 2 meses en Artesanalia2, afirmó que era un compromiso adquirido desde antes de la pandemia previsto para septiembre de 2020. Tras ajustar los calendarios y programación, empezarán a dar acceso a la exposición durante las semanas flexibles.

Dijo que trabajan en la próxima exhibición individual. Espera tener al joven venezolano Alejandro Brito y tienen previsto para 2021 un total de 3 exposiciones, más una colectiva geométrica.

Pasión por la artesanía y el Ávila

“Mi pasión es lo geométrico cinéticos – nos dice -. Estoy muy agradecida con el Ávila, porque mis inicios han sido con la artesanía venezolana. De hecho tengo 7 tiendas de artesanía en hoteles como el Eurobuilding, Renacenses, Pestana, Marriot  y Paseo las Mercedes. Soy la propietaria de una de las tiendas más  viejas en Caracas, ubicada en el sector la Cuadra del centro comercial  Paseo Las Mercedes con 47 años de fundada”.

La economista, quien siempre ha sido una apasionada del arte, los museos y la artesanía indígena, nos cuenta:

“La idea fue de unas señoras visionarias de Boconó. Abrieron la tienda y, hace 29 años, me la traspasaron. De allí surgieron otras”.

Destacó que además es una enamorada del Ávila, por lo que en sus registros contabilizan más de 320 Ávila vendidos en 29 años, porque es un arte muy emblemático.

Resaltó que los artistas hoy deben entender que entre arte y artesanía hay una línea delgada. Artista hoy es quien tiene un espíritu, una visión y un norte de incluso profesiones diversas. Actualmente muchos artesanos hacen cosas lindas que pasan casi por ser arte, “la galería es muy vibrante pero mis inicios son las artesanías”, puntializó.

Amanda Márquez, como conocedora del negocio, reveló a la “Voce” que escoge artistas que no sean tan vistos ni expuesto y que tenga algo nuevo que ofrecer, que demuestren un trabajo de excelencia y que sean talentos emergentes. Además que se deja guiar por su “olfato” y experiencia, al momento de escoger obras que destaquen por el color, la calidad y mucha energía del trabajo.

Letizia Buttarello Lavarte/Redazione Caracas