MADRID – Las curvas de incidencia del coronavirus muestran señales claras de que el estancamiento en la epidemia puede haberse acabado para dejar paso a lo que hasta ahora Sanidad ha calificado como “cambio de tendencia” o tendencia ascendente.
En algunas comunidades ya resuenan malos noticias. Según el último boletín de datos publicado por Sanidad, los casos por cada 100.000 habitantes a 14 días han subido en 13 comunidades, con especial fuerza en Navarra (8,3%), La Rioja (4,95%), País Vasco (3,4%) y Madrid (3,2%), aunque también se han incrementado en Castilla y León (2,3%), Extremadura (1,8%), Aragón (1,8%), Melilla (1,4%), Andalucía (1,1%), Canarias (1%), Cantabria (1%) , Baleares (0,7%) y Galicia (0,1%).
En el otro lado, este indicador solo desciende en Comunidad Valenciana (-4,8%) Murcia (-3,4%), Ceuta (-1,4%), Castilla-La Mancha (-1,3%) y Cataluña (-0,2%).
Cuando la incidencia a 7 días representa más del 50% de la incidencia a 14 días significa que algo no va bien. De hecho, incluso cuando este indicador -llamado también ‘razón de tasas’- supera el 40% ya hay motivos para la preocupación.
Bien, pues en estos momentos, La Rioja (67,2%), Navarra (64,5%), Baleares (56%), Aragón (54,8%), País Vasco (54%), Canarias (50,8%) y Castilla y León (50,4%) superan ese porcentaje. Y solo Comunidad Valenciana (39,8%) se mantiene todavía por debajo el 40%.
El pasado lunes dijo la subdirectora del Ccaes, María José Sierra que estos porcentajes, “nos indican claramente que la tendencia es ascendente, que está aumentando la transmisión y que es esperable que en los próximos días, si no se corrige, tengamos unos aumentos más claros”.
Por su parte, el presidente de Cantabria, Miguel Ángel Revilla, fue cogido en una conversación privada en la que calificaba a Madrid como “una bomba de relojería debido a la gestión de la pandemia”. Decía Revilla que doce días después de la Semana Santa habría un pico de casos procedentes mayoritariamente de Madrid.
Revilla se basa en lo que había visto en sus viajes a la ciudad madrileña: restaurantes abarrotados por la noche y “más de la mitad” de los clientes sin mascarilla. Muchos españoles de otras comunidades, que viven desde hace meses fuertes restricciones, especialmente en la hostelería nocturna, también se sorprenden de lo que denominan una imagen más próxima a la vida normal que una situación de alarma sanitaria.
Madrid aporta desde hace al menos un mes alrededor del 40% de los contagios diarios en España. Los responsables de sanidad justifican estas cifras en que Madrid es la ciudad con mayor densidad poblacional, la mayor de España. Expertos en salud pública, por su parte, creen que precisamente por eso, las medidas en Madrid deberían ser más estrictas en lo que se refiere, al menos, en los contactos sociales nocturnos y la movilidad.
Redacción Madrid
