Nueva devaluación impactará en la inflación


Ante la aparición en Gaceta Oficial de una nueva devaluación del bolívar fijado en 2.144,60 bolívares para la compra y 2.150 bolívares para la venta, el sector económico y el sindical se pronunciaron sobre su impacto en los costos, en la inflación y en la disminución de adquirir los productos de la canasta básica y, por ende, de la cesta alimentaria.
El economista José Grasso Vechio, dijo a pesar de que la devaluación generará un incremento de la inflación, la medida era esperada por todos, pues «el problema más grande que tenemos es el de la inflación. En el 2003 tuvimos una inflación de 27,3 por ciento; en el 2004, la inflación se colocó por encima del 19 por ciento. Esto significa que en dos años consecutivos tuvimos la inflación más elevada de toda América Latina, pese a los controles – dijo.


Explicó que los controles de precios continúan con la presión inflacionaria, no obstante, a los resultados arrojados en el mes de febrero en el mercado que lo ubicó en 0,2 por ciento.


El gasto público sigue allí. Es un gasto que va en aumento. Es un gasto público que no se está financiando con ingresos ordinarios sino con mayor endeudamiento –  manifestó.
El economista y analista financiero, José Grasso Vechio, dijo que se deben tomar medidas económicas para buscar estabilidad de la economía, en las variables macroeconómicas y producción del gasto público dirigida a fortalecer la inversión.


Inflación de 3,4 por ciento


Preocupado se mostró el sector industrial por la devaluación del bolívar.


El Presidente de Conindustria, Lope Mendoza, a través de un comunicado expresó la posición de los industriales y comentó que la medida inquieta al sector industrial porque muchos sectores manufactureros están sometidos a controles de precios, a la inamovilidad laboral, al aumento del salario e incremento en el precio del gas.


En el comunicado Mendoza presentó un balance negativo de la devaluación en el sector manufacturero. Este impacto en los costos será, según explicó, en 10,7 por ciento al fijado por el Banco Central de Venezuela.


Este aumento sin duda será traspasado a los precios en función de las decisiones que cada empresa tome de acuerdo a la dinámica de los mercados – refirió el máximo líder de los industriales.


Señaló que «el componente importado dentro de la estructura de costo promedio del sector industrial es el del 28 por ciento, lo que arroja una devaluación que generará un impacto inflacionario directo de 3,4 por ciento».


Igualmente, manifestó la necesidad de tomarse medidas adicionales que permitan sostener la posibilidad de crecimiento del sector industrial y su competitividad y reiteró que «si la economía está creciendo, los precios del petróleo están altos, se está sobre pasando las metas de recaudación, hay superávit fiscal y la inflación está más baja que nunca; entonces, una medida de devaluación pareciera una decisión de carácter fiscal».


También señaló que si se asume ese contexto, conjuntamente con más de 24 Millardos de dólares en Reservas Internacionales al cierre del mes de febrero de 2005, una devaluación constituye una medida de política económica que no parece estar atada a una estrategia más allá que igualar el tipo de cambio previsto en la Ley de Presupuesto 2005.


A lo anterior hay que agregar el mercado petrolero favorable y un superávit de cuenta corriente de más 14 millardos de dólares –  dijo.


«No hay mayor impacto»


Para la Cámara de Comercio de Caracas tampoco hubo sorpresa en el anuncio de la devaluación, como lo señaló su Presidente Alejo Planchart, quien agregó que «el anuncio se hizo en diciembre; por lo que era eminente el cambio».
De acuerdo a ese anuncio la mayoría de los productos no controlados subieron sus precios, por lo que «se tomó esa previsión. De modo, que lo que queda por subir ahora serían aquellos productos que están bajo control de precios del Gobierno. Tendrán ahora que reflejar el nuevo aumento del precio del dólar» establecido por el Gobierno nacional.
Sin embargo, dijo que el impacto no será mayor, porque los productos de la canasta básica, conjuntamente con las medicinas, será a las que  se tendrán que ajustar los precios.


Es una treta del Gobierno


El integrante de la Confederación de Trabajadores de Venezuela, Pablo Castro, dijo que la puesta en vigencia de la devaluación «es parte de la treta del Gobierno. Ese es un truco que viene aplicando, desde el momento que asumió, el Presidente de la República, (Hugo) Chávez. El anuncio con antelación del incremento del sueldo mínimo a 400 mil bolívares con respecto a la devaluación, es una treta; donde el único perjudicado es el trabajador».


Destacó que se trató de una ilusión monetaria el anuncio del sueldo mínimo efectuado días atrás, ya que la devaluación del bolívar en relación con el dólar, disminuye el poder adquisitivo de los venezolanos, a quienes se les hará, según dijo, muy difícil adquirir los productos de la cesta básica.
Castro justificó sus señalamientos diciendo que se pretende
«negar la convocatoria de la comisión tripartita para concertar no solamente el salario del trabajador, sino políticas que lleven a preservar sus ingresos y la estimulación para la inversión y para el empleo».