De los 33 colombianos señalados como presuntos paramilitares y detenidos en mayo del año pasado, 16 fueron deportados a su país, según informó el cónsul neogranadino en Caracas, Darío Angarita Medellín. Este grupo –que formaba parte de los 133 detenidos en las cercanías de Caracas- fue trasladado a la Oficina Nacional de Identificación y Extranjería (ONIDEX) en el Estado Táchira, para ser llevados a Colombia. Según información de la embajada colombiana en Venezuela, «los 16 colombianos en los últimos meses oficiaron como testigos colaboradores en el caso de los presuntos paramilitares capturados en la finca Daktari el año anterior. Tenían medida de protección por parte de las autoridades venezolanas».
Angarita explicó que «los 16 deportados pertenecían a un grupo de 33 colombianos que habían decidido acogerse a la figura de testigos colaboradores. Ese grupo nunca fue imputado y gozaban de protección especial de las autoridades».
