Gran Misión Conciencia Ciudadana

Gran Misión Vivienda Venezuela.

 

Con la llegada del Presidente Chávez al poder en el año 1999 muchos aspectos del quehacer gubernamental cambiaron. Una de las tantos es la forma de planificar (o improvisar) y ejecutar las políticas públicas, incluso partiendo desde su propia denominación. Antes se oía hablar de “Programas” (por ejemplo el “Programa del Vaso de Leche Escolar” o el “Programa de Becas Gran Mariscal de Ayacucho) a lo cual se le dió paso a una cantidad de mecanismos bautizados con términos castrenses como es el caso de los “Planes” y las “Misiones”, éstas últimas diversificadas en “Grandes Misiones”, “Misiones” y “Micro Misiones”.

Luego de conocer el Plan Bolívar 2000 vinieron la Gran Misión Barrio Adentro (I, II, III y IV), Misión Milagro, Misión Sonrisa, Misión Robinson (I y II), Misión Ribas, Misión Sucre, Misión Alma Mater, Misión Ciencia, Misión Cultura Corazón Adentro, Gran Misión Saber y Trabajo, Misión Vuelvan Caras, Gran Misión Agro Venezuela, Misión Nevado, Misión Guaicaipuro, Gran Misión Hogares de la Patria, Misión Hijos e Hijas de Venezuela, Misión Niño Simón, Misión Madres del Barrio, Misión Niño Jesús, Misión Negra Hipólita, Misión José Gregorio Hernández, Misión Barrio Adentro Deportivo, Misión Jóvenes de la Patria, Gran Misión Amor Mayor, Gran Misión Negro Primero, Misión Identidad, Misión Piar, Misión Mercal, Gran Misión Vivienda Venezuela, Gran Misión Barrio Nuevo Barrio Tricolor, Misión Hábitat, Misión Árbol, Gran Misión a Toda Vida Venezuela, Gran Misión Nueva Frontera de Paz, Gran Misión Abastecimiento Soberano, Misión Eléctrica Venezuela, Misión Transporte y la Misión Eficiencia o Nada.

Todo este entramado burocrático está aparentemente organizado en el denominado “Sistema Nacional de Misiones” y tiene su soporte legal en la Ley Orgánica de Misiones, Grandes Misiones y Micro Misiones promulgada bajo el paraguas de la Ley Habilitante que el Presidente Maduro ostentaba para el año 2014 y que en algún momento veremos plasmado en el nuevo texto de la Constitución de la República que debería estar preparando la ANC elegida en julio del año en curso.

Lo cierto es que este Teatro de Operaciones que se llama República Bolivariana de Venezuela, a pesar de gozar con ese amplio abanico de mecanismos está clara y evidentemente incompleto. No carece de logística, ya que incluso le sobra; tampoco está necesitado de soldados ya que (según se dice) la tropa se cuenta por los ocho millones de almas; le falta el elemento más importante de todas las Grandes Misiones: la de crear y formar conciencia ciudadana. ¿Quieren muestras? Sigamos con pocos ejemplos.

Podemos edificar 3.000.000 de nuevas casas, pero mientras no preparemos a las familias que las ocuparán para vivir en esa nueva realidad, entonces seguirán subiendo motos por los ascensores, modificando las fachadas de forma arbitraria, instaurándose “Pranes” por cada urbanismo entregado y así cada vicio o malformación social de las barriadas, se mudarán a los nuevos condominios en las maletas de sus habitantes.

También se podrán rehabilitar casas y edificios, con techos, fachadas, ventanas y sanitarios que permitan humanizar y mejorar la calidad de vida de sus habitantes, pero si seguimos permitiendo que luego de instalado un lavamanos, sea desincorporado y vendido, entonces se habrá perdido el esfuerzo.

Igual con los módulos de salud y atención primaria: mientras sean dotados de equipos, mobiliarios y medicinas que luego en una noche pasen a manos del hampa bajo la mirada tolerante de quienes deberían ser los beneficiados, entonces las buenas intenciones se verán perdidas al viento.

Asimismo, cuando en las aceras de Caracas se instale un vendedor informal y ante los ojos complacientes de funcionarios de seguridad pública coloque a la venta productos que sólo deberían ser vendidos por la Red Mercal o por las CLAP´S, entonces hasta la más impoluta de las inspiraciones por mejorar la crisis alimentaria se verá ultrajada.

Qué decir de los “Refugios para Motorizados” construidos en muchas vías principales, que nunca fueron utilizados para tales fines y hoy en día se encuentran desmantelados por completo.

Entonces, se me ocurre que falta una Gran Misión que se ocupe de formar y crear conciencia en la población. Además la inversión está sólo enfocada en “querer echarle bolas”, porque lo material y lo humano ya lo tiene el Gobierno. Nada más y nada menos que el Sistema Nacional de Medios Públicos y hasta el mismísimo “Noticiero de la Patria” que se transmite tres veces al día en cadena de radio y televisión. Ahora, con un nuevo Ministro del Poder Popular para la Comunicación en Información al frente de esa responsabilidad, es más que oportuno planificar y llevar adelante una idea semejante.

No solo en el Noticiero de la Patria debemos ver y oír repetidas veces lo que el gobierno “está planificando hacer” pero que a veces muere con la simple idea; o aquello que medianamente alcanzan a terminar de hacer, sino que además es muy pertinente enseñar cómo se debe hacer y qué conductas positivas debe el ciudadano asumir para que lo hecho se mantenga por la mayor cantidad de tiempo posible, y que el mandato constitucional de “dar la mayor cantidad de felicidad posible al pueblo” sea una responsabilidad compartida entre los gobernantes y los gobernados.

Como me diría un General de la Patria aún activo “Las comparaciones son odiosas”, pero para algo existen y viene al caso traer a colación una de ellas: La Cultura Metro de los años 80 y 90, y la comparamos con “La destrucción del Metro” de hoy en día; también la campaña que PDVSA promovía en los 90 denominada “Cuidar es Querer” o “Petróleo en Gotas”. ¿Quieren otra muestra palpable de la falta de conciencia? Visiten el Bulevar de Sabana Grande y observen el descuido y deterioro de sus espacios luego de la inmensa inversión que se le hizo en tiempos recientes.

Son incuantificables los ejemplos que puedo presentarles, pero es más sencillo invitarlos a salir de su casa y pedirles que tengan precaución para evitar tropezarse con alguna botellita olvidada por algún bebedor de la noche anterior.

Nuestro principal y primordial problema fue, es y será la conciencia de la ciudadanía. Les garantizo que cuando se enfoquen los esfuerzos hacia ese Norte, entonces buena parte de la crisis de corrupción, inseguridad, insalubridad y desgobierno estarán resueltos.

Maurizio Cirrottola Russo

Abogado

Email: [email protected]

Twitter: @cirrottolar

Instragram: @cirrottola