CARACAS – “Para hablar de inflación puede ser útil una analogía con la hepatitis, que es una enfermedad que se desarrolla en cuatro tipos A, B, C, y D. Hay un tipo de inflación baja que podemos llamar tipo A, otra moderada y crónica que podemos denominar tipo B, en niveles altos y en aceleración sería tipo C, y la hiperinflación que bien podemos denominar como D”, rompe el hielo, Leonardo Vera, en entrevista concedida a Víctor Salmerón, para el portal Prodavinci.
Y avanza en su análisis:
“En medicina, la hepatitis A suele ser combatida por una regla o por la reacción automática del mismo sistema inmunológico. Lo mismo ocurre en países donde la inflación anual es menor a un dígito. En cierto modo, los bancos centrales tienen una función de reacción que los hace mover la tasa de interés y el nivel de demanda de bienes y servicios automáticamente. Cuando llegas a hepatitis D, los medicamentos más fuertes no funcionan y los médicos pueden llegar a recomendar un trasplante de hígado, lo que en el plano económico asocio con un trasplante de moneda”.
“Por eso es común encontrar en eventos de hiperinflación reformas monetarias que al final conducen a la adopción de una nueva moneda como el dólar”, da con la almendra del asunto. Leonardo Vera es profesor de economía en la Universidad Central de Venezuela (UCV). Es profesor adjunto en Flacso-Ecuador.
En hiperinflación desde octubre
Una nota del periódico barquisimetano “El Impulso”, fechada el 14 de noviembre de este año, establece que “Venezuela se encuentra en hiperinflación, al menos desde el mes de octubre de este año, de acuerdo con los datos presentados por la economista Karelys Abarca, investigadora del Observatorio de Gasto Público (OGP) del Centro para la Divulgación del Conocimiento Económico para la Libertad (Cedice Libertad), para quien es ‘innegable’ el carácter hiperinflacionario del proceso que se vive en Venezuela”.
La Hiperinflación es una pérdida del poder adquisitivo de una moneda a un compás muy elevado. Según El Mundo Economía & Negocios las definiciones formales van de una tasa de inflación de 100% en un lapso de tres años, a inflación sobre 50% al mes. “La principal causa de hiperinflación es un aumento rápido y masivo de la cantidad de dinero que no se encuentra apoyado por crecimiento en la producción de bienes y servicios”, dice el diario especializado en dinero.
