CARACAS – El gobierno de Canadá rechazó la decisión del Consejo Nacional Electoral (CNE) de reprogramar para el 20 de mayo las elecciones presidenciales y aseguró que la medida no cambia la situación venezolana.
A través de la cuenta en Twitter de la embajada expresaron:
“La decisión del régimen de Maduro de posponer las elecciones de Venezuela hasta mayo no cambia nada. Un significativo cambio democrático es necesario para que las elecciones sean libres y justas con la completa participación de todos los venezolanos”.
Además, agregaron que una “verdadera democracia y elecciones libres y justas no pueden” darse en Venezuela mientras existan prisioneros políticos, se socave la libertad de prensa y dirigentes de la oposición permanezcan en arresto domiciliario.
De igual manera, el gobierno de Estados Unidos expresó su postura de rechazo y reiteró su llamado a unos comicios “justos, libres y con observación internacional creíble”.
Un portavoz del Departamento de Estado, que prefirió mantenerse en anonimato, dijo a EFE: “Renovamos nuestro llamado al establecimiento de un calendario electoral en cumplimiento con la Constitución y en consulta con la legítima Asamblea Nacional”.
Y agregó:
“Unas elecciones libres y justas deben incluir la total participación de todos los partidos y líderes políticos, un calendario electoral apropiado, observación internacional creíble y una autoridad electoral independiente”.
Cuando la Asamblea Nacional Constituyente (ANC) hizo el llamado al CNE para realizar de manera anticipada los comicios, Canadá, Estados Unidos y otros países del mundo dejaron claro que no reconocerían los resultados de este proceso. Desde el punto de vista de la comunidad internacional esta actividad electoral no es legítima, ni justa, ni libre.
“Estados Unidos está con las naciones democráticas de alrededor del mundo en apoyo al pueblo de Venezuela y su derecho soberano a elegir a sus representantes a través de elecciones libres y justas”, insistieron hoy fuentes oficiales.
La coalición opositora representada por la Mesa de la Unidad Democrática (MUD) también mantiene su negativa a este proceso. Recientemente sus líderes expresaron que no participarían en el mismo por considerar que no se dan las garantías necesarias.
