CARACAS – El gobierno nacional comenzó a responder con fuerza al presunto atentado contra el presidente Nicolás Maduro, hecho acaecido el sábado cuatro de agosto en la avenida Bolívar. Considerables detenciones, allanamientos a la inmunidad parlamentaria y difusión de supuestas pruebas han sido las últimas actuaciones del Gobierno. La opinión pública diría no aclares que oscurece, pero lo cierto es que apenas comienza la reacción.
La vicepresidenta ejecutiva, Delcy Rodríguez, informó a través de su cuenta en la red social Twitter sobre una reunión entre diferentes organismos del Estado. Estuvieron presentes el presidente del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ), Maikel Moreno, el canciller Jorge Arreaza y el titular del Ministerio Público (MP), Tarek William Saab. Este último ofreció una rueda de prensa en la que aseguró que, en total, son 19 los responsables del ataque.
La reunión se produjo con la finalidad de evaluar las evidencias que se tienen hasta ahora del presunto intento de magnicidio. Además, se conversará sobre los mecanismos más eficaces que se podrían utilizar para encontrar y capturar a los responsables. La vicepresidenta señaló que se basarán en las presuntas evidencias que ha difundido el Gobierno.
Las evidencias presentadas por el Gobierno
El presidente Nicolás Maduro transmitió una cadena nacional para mostrar las evidencias que se tienen sobre el presunto atentado en su contra. Se trata de una serie de declaraciones y audios de presuntos participantes en el ataque. Uno de los supuestos atacantes entrevistados señaló a Julio Borges y Juan Requesens como orquestadores del atentado.
Según la evidencia mostrada por el presidente Nicolás Maduro, los autores materiales fueron entrenados en Colombia, específicamente en una finca en Chinácota, al norte del país. El mandatario señaló a Osman Delgado Tabosky y a Rayder Russo Márquez, venezolanos residentes en el extranjero, como los autores intelectuales del ataque. Estas dos personas, fueron señaladas públicamente por el rebelde asesinado, Óscar Pérez, como infiltrados en su movimiento el año pasado.
