CARACAS – El Ministerio del Interior de España a fecha 31 de octubre informó que un total de 28.847 ciudadanos de Venezuela se han beneficiado del permiso de residencia por razones humanitarias en lo que va de 2019.
Estos permisos de residencia supone 65,3% del total de los 44.163 expedientes de protección internacional instruidos y elevados a la CIAR (Comisión Interministerial de Asilo y Refugio) en los 10 primeros meses de 2019. En 2018 se elevaron 12.889 expedientes a este órgano. Por tanto, las resoluciones este año son ya más del triple.
Este año se procesaron de media más de 4.000 solicitudes al mes, frente a las 1.074 de media en 2018. Aún así, en agosto de 2019 el sistema de protección internacional contaba un número elevado de solicitudes pendientes de resolución. La cifra es de 127.520, de acuerdo con datos de la Oficina de Asilo y Refugio (OAR).
Los venezolanos lideran el ranking de las nacionalidades de los solicitantes de asilo en España. Desde el 1 de enero hasta el 30 de septiembre de 2019, unos 28.429 ciudadanos de Venezuela pidieron protección internacional en España. Hasta esa fecha, se habían presentado 82.015 peticiones en total.
Tomando en cuenta que Venezuela no está entre los países con mayores tasas de resoluciones favorables de asilo, en enero el Ministerio del Interior habilitó para los venezolanos la autorización residencia temporal “por razones humanitarias”. El objetivo principal era “reducir el stock” de peticiones pendientes de resolución.
De esta forma, debido a la “compleja” situación de crisis que atraviesa Venezuela, el gobierno español activó esta herramienta para los venezolanos a los que se les hubiese denegado la protección internacional por la vía convencional desde el año 2014. Este permiso, cuya duración es de un año prorrogable a dos, está contemplado en la Ley de Asilo y Refugio bajo la figura de “ayuda humanitaria” o refugiado.
el ministro del Interior español, Fernando Grande-Marlaska, tachó de “lamentable” el estado de la Oficina de Asilo y Refugio (OAR) A su llegada al departamento en verano de 2018. También diseñó un plan de choque para reforzar los recursos humanos y tecnológicos del órgano.
Los expedientes pasan por esta oficina, antes de llegar al CIAR, que es la que se los remite tras examinarlos y admitirlos a trámite. También plantea propuestas de autorización de residencia temporal por razones humanitarias. Luego la CIAR los debe elevar al Ministerio del Interior.
